Según la propia marca Riedel deberíamos decantar toda clase de vinos, jóvenes y añejos; blancos, tintos o espumosos, ya que lograremos realzar sus características. En los vinos de más edad conviene decantarlos para separar el sedimento y los vinos más jóvenes para oxigenarlos y liberar sus aromas y sabores.
Este decantador para vino, con un volumen de 1050 mililitros, fue diseñado por la casa Riedel en el año 2004 y fabricado mediante métodos mecánicos con cristal libre de plomo. Su altura es de 23 cm.
Cuidados y trucos para que tu decantador de vino Riedel se mantengan en optimas condiciones:
- Enjuagar con agua bien caliente después de cada uso. Repetir la operación hasta que el agua salga clara.
- No es necesario el uso de jabón ni detergentes.
- Para conseguir más brillo, coloca sobre vapor de agua. Usar paños de microfibra y pulir con cuidado
- Para que no salgan arañazos, evitar el contacto con otras copas o vasos de cristal o con metales.
- Las manchas se evitan usando aguas balandas con bajo contenido en minerales. Si ya existen manchas, usar vinagre blanco